03 marzo 2010


PONGAMOS QUE HABLO DE MADRID ...

Había una canción que hablaba de un lugar donde se cruzan los caminos y los destinos, de los niños que andaban con prisa y de las princesas que querían ser aventureras.
De un lugar sin mar ni estrellas.

Hace unos días viajé a ese lugar, y crucé mi camino con muchas personas; no vi el mar, ni pude ver el sol ni las estrellas, pero encontré calor.

A todos quienes habéis compartido estos últimos días con mi filosofía, con mis historias, con mis enseñanzas y sobre todo con mi afonía ... mi mas sincera gratitud.

Ha sido un privilegio haber estado con todos vosotros ... en Madrid.